Roger Waters, el legendario músico y cofundador de la banda Pink Floyd, tiene una conexión especial con Argentina. Su música, marcada por una profunda crítica social y temas introspectivos, ha resonado intensamente en el público argentino, que lo ha recibido con los brazos abiertos en cada una de sus visitas. En este sentido, en 2012, marcó un hito con una serie de conciertos que dejó un hermoso recuerdo en la memoria de los asistentes y en la historia de los espectáculos internacionales en el país.
En este artículo, te explicaremos la relación de Roger Waters con Argentina, los detalles de sus legendarias presentaciones en el estadio Monumental en 2012 y cómo el músico ha incorporado mensajes sociales en sus espectáculos.
El récord de 2012: Nueve noches en el Monumental
En marzo de 2012, Roger Waters llevó a cabo una de las hazañas más destacadas en la historia de la música en Argentina: realizó nueve presentaciones consecutivas en el estadio Monumental de River Plate, un récord que en su momento superó todas las expectativas. De esta forma, durante su gira The Wall Live, el músico ofreció un espectáculo multidimensional y emotivo, con una escenografía imponente que incluía un gigantesco muro que se erigía y caía al ritmo de la música. Así, la serie de conciertos atrajo a unas 430.000 personas, consolidando a Waters como uno de los artistas internacionales más queridos y convocantes del país.
De esta manera, cada una de las nueve noches fue un rotundo éxito de taquilla, con entradas agotadas que demostraron el fervor del público argentino por la obra de Waters. Gracias a esto, los asistentes pudieron disfrutar de clásicos como Another Brick in the Wall Part 2, Comfortably Numb y In the Flesh?, canciones que forman parte del álbum The Wall. Además, estos conciertos quedaron inmortalizados en el documental Roger Waters: The Wall, lanzado en 2014, que capturó la esencia de la gira y la respuesta apasionada de los asistentes.
La gira de despedida: This Is Not a Drill
La gira This Is Not a Drill de Roger Waters en 2023 marcó un punto culminante en la historia de los conciertos en Argentina y representó la despedida definitiva del músico de los escenarios. Esta última gira fue una experiencia que dejó una profunda impresión en todos los asistentes, ya que Waters, fiel a su estilo, ofreció un espectáculo visualmente impactante y cargado de mensajes políticos y sociales, que se mezclaron de manera magistral con su música.
De esta manera, el músico británico de 80 años, conocido por su enfoque crítico y activista, llevó a su público en un viaje emocional que abarcó tanto los grandes éxitos de Pink Floyd como sus obras en solitario. Así, las presentaciones en Argentina estuvieron repletas de momentos memorables, desde las potentes interpretaciones de Wish You Were Here y Another Brick in the Wall, hasta los nuevos temas que reflejan sus preocupaciones sobre el estado del mundo actual.
De tal forma que, el público argentino, siempre apasionado y entregado, respondió con emoción a cada momento del show. Sin duda, la gira fue un rotundo éxito y se destacó por la profunda conexión entre Waters y sus seguidores. Y es que, cada interpretación fue recibida con ovaciones y coros multitudinarios que demostraron la admiración y el respeto que el músico ha cultivado a lo largo de su carrera.
Producción y setlist: Un espectáculo inolvidable
La producción de This Is Not a Drill se caracteriza por un despliegue impresionante de recursos tecnológicos y escénicos que transforman el concierto en una experiencia inmersiva. A este respecto, las pantallas gigantes, los juegos de luces y los efectos visuales sincronizados con la música crean una atmósfera que transporta al público a un mundo donde la crítica social y la introspección son protagonistas. De este modo, Waters se aseguró de que cada detalle estuviera cuidado al máximo para que el mensaje de sus canciones llegara de manera clara y poderosa.
En este sentido, el setlist de la gira incluyó tanto éxitos de Pink Floyd como temas de su carrera solista. Por ello, los asistentes disfrutaron de canciones como Wish You Were Here, Time, Money y, por supuesto, Another Brick in the Wall.
Compromiso social y legado en Argentina
Además de ser conocido por su talento musical, también lo es por su compromiso social y político. En Argentina, este compromiso ha sido particularmente relevante, puesto que, durante su visita en 2012, dedicó su concierto a las víctimas de la dictadura y expresó su apoyo a las Madres de la Plaza de Mayo. Waters también ha mencionado en diversas ocasiones su admiración por el escritor argentino Ernesto Sábato, destacando su papel en la lucha por la memoria y la verdad.
De esta manera, el legado de Waters en Argentina va más allá de la música porque ha logrado establecer un vínculo emocional con el público al compartir y reconocer las luchas históricas del país. Este enfoque ha fortalecido su conexión con los argentinos, que lo consideran un aliado en la búsqueda de justicia y derechos humanos. Así, sus conciertos son un espacio de reflexión colectiva, donde la música y la historia se entrelazan de manera profunda.