Teotihuacán es un destino arqueológico que hace viajar en el tiempo. Este lugar, situado a menos de una hora de la Ciudad de México, alberga algunas de las construcciones más impresionantes de Mesoamérica. Así, sus pirámides gigantes, su misteriosa historia y la energía que se siente al recorrer sus amplios caminos lo convierten en una experiencia inolvidable.

Además, a diferencia de otras zonas arqueológicas, puedes subir a las estructuras más altas y ver el paisaje desde las alturas. Asimismo, el sitio es tan extenso que cada rincón tiene algo nuevo por descubrir, ya sea templos ocultos, antiguos murales o detalles arquitectónicos que revelan cómo vivían sus antiguos habitantes. Más allá de la historia, hay muchas formas de disfrutar la visita, desde volar en globo hasta probar bebidas tradicionales en una cueva subterránea.

En este artículo, te explicaremos cómo llegar hasta Teotihuacán sin complicaciones, te contaremos un poco de su historia y sobre las construcciones más impresionantes del lugar. También te compartiremos consejos para que aproveches tu recorrido y actividades adicionales que harán que tu visita sea aún más interesante.

¿Cómo llegar a Teotihuacán?

Si viajas desde la Ciudad de México, tienes varias opciones para llegar a Teotihuacán. Para empezar, la forma más práctica es tomar un autobús desde la Terminal del Norte, donde salen con frecuencia y te llevan directamente a la zona arqueológica en aproximadamente una hora. También puedes contratar un tour que incluya transporte y guía, lo cual facilita la experiencia si prefieres evitar complicaciones.

Igualmente, si prefieres conducir, debes tomar la autopista México-Pachuca y seguir las señales hacia Teotihuacán. El trayecto dura cerca de 50 minutos, dependiendo del tráfico y hay estacionamientos amplios cerca de las entradas, por lo que no tendrás problemas para dejar tu auto. Otra opción interesante es viajar en taxi o en una aplicación de transporte, aunque el costo es mayor en comparación con el autobús. Si eliges este método, asegúrate de acordar el precio o verificar la tarifa antes de iniciar el viaje.

Historia de Teotihuacán

Teotihuacán fue una de las ciudades más grandes de Mesoamérica y alcanzó su máximo esplendor entre los siglos II y VI. Aunque se desconoce con certeza quiénes la fundaron, su influencia cultural se extendió por toda la región, dejando un impacto en otras civilizaciones como los mayas y los zapotecas.

De esta forma, durante su auge, albergó a más de 100,000 habitantes y se convirtió en un centro de comercio, religión y poder político. Y sus enormes pirámides y planificación urbana reflejan un conocimiento avanzado en arquitectura y organización social. La Calzada de los Muertos, su avenida principal, conecta los principales templos y evidencia la grandeza con la que fue concebida. En este sentido, a pesar de su abandono antes de la llegada de los mexicas, su importancia nunca se perdió. Siglos después, estos últimos la consideraron un lugar sagrado y le dieron el nombre con el que hoy se conoce: «el lugar donde los dioses fueron creados».

Principales estructuras y monumentos

Teotihuacán alberga construcciones impresionantes que reflejan el conocimiento arquitectónico de sus antiguos habitantes. Cada una tiene características particulares que la hacen diferente, tanto en su función como en su simbolismo dentro de la ciudad:

  • Pirámide del Sol: Esta es la edificación más alta de Teotihuacán y se cree que tenía un propósito ritual. Así, desde la cima, se obtiene una vista panorámica de todo el sitio arqueológico. Por ello, si decides subir los escalones, es recomendable hacerlo con calma, ya que la pendiente es pronunciada y el esfuerzo puede resultar agotador.
  • Pirámide de la Luna: Aunque es más pequeña que la del Sol, su ubicación al final de la Calzada de los Muertos le da una presencia imponente. En su caso, se han encontrado entierros y ofrendas en su interior, lo que indica su importancia ceremonial. A diferencia de la otra pirámide, la cima no es accesible al público.
  • Templo de Quetzalcóatl: También llamado Templo de la Serpiente Emplumada, resalta por sus relieves esculpidos en piedra. Sus muros muestran figuras de serpientes con detalles fascinantes. Además, excavaciones han revelado restos humanos, lo que sugiere que fue escenario de sacrificios. Esta estructura forma parte de la Ciudadela, un conjunto arquitectónico relevante.
  • Calzada de los Muertos: Esta vía conecta los principales templos de la ciudad y tiene más de dos kilómetros de longitud, por lo que caminar por ella permite apreciar las dimensiones del lugar y entender su distribución. A sus costados se pueden ver restos de antiguas plataformas y edificios administrativos que jugaron un papel clave en la vida cotidiana.

Actividades adicionales que puedes realizar en Teotihuacán

Si quieres ver la zona arqueológica desde una perspectiva diferente, un paseo en globo aerostático es una opción fascinante. Durante el amanecer, los globos se elevan sobre las pirámides, ofreciendo una vista panorámica de todo el sitio. En este caso, la experiencia dura aproximadamente una hora y al aterrizar se ofrece un brindis con vino espumoso. Es recomendable reservar con anticipación, ya que la disponibilidad puede ser limitada en temporadas de alta demanda.

Otro plan interesante es visitar los talleres de obsidiana, donde los artesanos locales muestran cómo se trabajaba esta piedra en la época prehispánica. Además de conocer el proceso de tallado, puedes adquirir figuras y piezas hechas a mano. Ten en cuenta que algunas visitas incluyen explicaciones sobre el maguey y la producción de pulque, una bebida tradicional que todavía se elabora en la región.

Por otro lado, si buscas una actividad menos común, puedes explorar la Ruta de los Murales. A lo largo de este recorrido, encontrarás restos de antiguas pinturas que decoraban los edificios teotihuacanos, como los impresionantes murales de los jaguares y los caracoles emplumados. A este respecto, para entender mejor su significado, es recomendable contratar un guía especializado que explique los detalles de cada obra.

Consejos para la visita

Recorrer Teotihuacán puede ser una experiencia increíble si te preparas bien. Por lo tanto, para aprovechar al máximo el día, es importante tener en cuenta ciertos aspectos que facilitarán el recorrido y evitarán contratiempos.

  • Evita los fines de semana y días festivos: Si visitas en sábado o domingo, habrá más personas y vendedores ambulantes en cada rincón. Sin embargo, entre semana, el ambiente es más tranquilo y las fotografías quedan mucho mejor sin multitudes al fondo.
  • Explora la Puerta 3 para entrar más rápido: La mayoría de los visitantes usa la Puerta 1, lo que genera largas filas. Si quieres evitar demoras, ingresa por la Puerta 3, que suele tener menos afluencia y está más cerca de la Pirámide del Sol.
  • Sube la Pirámide del Sol por la parte derecha: Aunque hay varios accesos, el lado derecho suele tener menos gente. Así evitarás esperas innecesarias y podrás hacer el ascenso con mayor comodidad, sin tantas interrupciones.
  • Visita la Cueva de la Pirámide del Sol: Pocos saben que hay un túnel bajo esta pirámide. En realidad, se encuentra cerrado al público, pero el museo del sitio exhibe imágenes y explicaciones detalladas sobre este pasaje subterráneo.
  • Prueba la bebida prehispánica en la cueva subterránea: En el restaurante «La Gruta», ubicado en una cueva natural cerca de la entrada, puedes probar el pulque, una bebida ancestral de maguey. Además, el ambiente bajo tierra es perfecto para refrescarse después del recorrido.