Viajar al extranjero significa descubrir nuevas culturas, probar sabores diferentes y conocer costumbres que muchas veces no tienen nada que ver con las tuyas. Una de las dudas más comunes que aparece en cualquier destino es cómo manejar el tema de las propinas. Un gesto considerado cortés en un país puede interpretarse como innecesario o hasta inapropiado en otro.

Nosotros sabemos que enfrentarse a la cuenta en un restaurante, pedir un taxi o dejar el hotel puede volverse incómodo si no tienes claro qué esperan de ti. Las diferencias culturales hacen que sea fácil equivocarse, ya sea por dejar demasiado poco, excederse o dar propina en un lugar donde no corresponde.

En esta guía vas a encontrar una orientación clara para moverte con seguridad en distintos destinos. Te contaremos cómo se maneja la propina en América del Norte, América Latina, Europa, Asia y otras regiones. De esta manera podrás disfrutar de tu viaje sin estrés y con la tranquilidad de que estás respetando las costumbres locales.

Propinas en América del Norte

En Estados Unidos y Canadá, dejar propina forma parte de la rutina diaria y se entiende como un deber más que como elección. En restaurantes de servicio completo se espera entre un 18 y un 22% de la cuenta, mientras que en bares lo común es dejar uno o dos dólares por bebida. A los taxistas se les suma entre un 10 y un 15 % extra, mientras que en hoteles se acostumbra dar entre dos y tres dólares por maleta al personal de portería o una cantidad similar por noche al servicio de limpieza. Este esquema se debe a que gran parte del sueldo de quienes trabajan en estos oficios proviene directamente de las propinas.

Asimismo, en ambos países, pagar con tarjeta permite añadir la propina directamente en el recibo, aunque en muchos casos el personal prefiere recibirla en efectivo porque la cobra más rápido. Para que tu experiencia sea más fluida, conviene llevar billetes pequeños y monedas, especialmente en ciudades turísticas donde se espera un pago inmediato.

Propinas en América Latina

En América Latina la práctica de las propinas varía de manera considerable entre países, y es importante conocer las diferencias antes de viajar. En México, por ejemplo, se acostumbra dejar entre un 10 y un 15% en restaurantes, mientras que en hoteles se entregan diez o veinte pesos por maleta. En Costa Rica y Panamá lo común es agregar un 10% cuando no está incluido en la cuenta, y en los tours se valora mucho dar entre cinco y diez dólares por persona y día al guía.

Por otro lado, en Sudamérica las costumbres cambian según el país. En Argentina suele dejarse un 10 % en restaurantes, aunque no existe obligación de hacerlo. En Brasil ese 10 % suele aparecer ya añadido en la cuenta, y únicamente se entrega algo extra cuando el servicio supera las expectativas. En Chile el 10% es sugerido por defecto y puedes aceptarlo o rechazarlo, mientras que en Perú y Colombia es común que los restaurantes ya sumen un 10% a la cuenta. En cualquier lugar lo recomendable es preguntar si el servicio está incluido, evitando así pagar dos veces.

Propinas en Europa

En Europa Occidental el sistema también presenta variaciones que conviene tener en cuenta. En el Reino Unido y en Irlanda los restaurantes acostumbran añadir un 12,5% de servicio; si no figura en la cuenta, se espera que el cliente deje entre un 10% y un 12%. En Francia, la expresión “service compris” señala que el servicio está incluido; aun así, suele dejarse algunas monedas o un 5% extra en restaurantes de nivel medio o alto. En España y Portugal no es obligatorio dejar propina, aunque se considera adecuado dejar algunas monedas o un 5% en restaurantes con servicio completo.

De igual forma, en Italia, el “coperto” que aparece en la cuenta corresponde al uso de cubiertos y no debe confundirse con la propina. Lo común es dejar algunas monedas o hasta un 5% en caso de recibir buena atención. En Alemania, Austria y Suiza el servicio está incluido en el precio, pero se espera que el cliente redondee la cuenta o deje un 5 a 10% adicional en agradecimiento.

Propinas en Asia

En Asia las costumbres sobre propinas son muy diversas y responden a tradiciones culturales particulares. En Japón, por ejemplo, no se espera ningún tipo de gratificación, y dar dinero extra puede incluso interpretarse como una ofensa. En Corea del Sur sucede algo parecido, aunque en hoteles internacionales o servicios pensados para turistas se admite una pequeña propina. En China continental la práctica tampoco es común, excepto en circuitos turísticos donde guías y conductores sí esperan un pago adicional.

Igualmente, en otros países de la región la propina se ha vuelto parte de la experiencia. En Tailandia y Vietnam es común dejar entre un 5% y un 10% en restaurantes de gama media o alta, mientras que en bares y taxis basta con redondear la tarifa. En Singapur y Malasia la cuenta ya incorpora un cargo de servicio del 10%, aunque se valora añadir algo más si la atención fue destacada. En India lo normal es un 5 a 10% en restaurantes y pequeñas cantidades a porteros y camareros. En Australia y Nueva Zelanda, aunque no forman parte de Asia, las costumbres son similares: no es obligatoria, pero un 10% se agradece en locales de alto nivel.

Propinas en Medio Oriente y África

En Medio Oriente la propina es habitual y forma parte de la vida diaria. En los Emiratos Árabes Unidos lo esperado en restaurantes es entre un 10 y un 15% cuando la cuenta no incluye cargo de servicio. En hoteles, lo usual es dar entre cinco y diez dirhams por maleta y dejar algo adicional al personal de limpieza. En Israel se acostumbra sumar entre un 10 y un 12% en restaurantes, mientras que en taxis suele bastar con redondear la cuenta. En países del Magreb, como Marruecos, Túnez o Egipto, se valora dar pequeñas propinas en efectivo, por lo que es útil llevar billetes y monedas de poco valor.

En África subsahariana las costumbres cambian según se trate de áreas urbanas o de circuitos de safari. En Sudáfrica los restaurantes suelen esperar entre un 10 y un 15%, mientras que en taxis se acostumbra redondear. Durante un safari, la norma es dar diez a veinte dólares diarios al guía y entre cinco y diez al personal del campamento, cantidad que suele repartirse entre todos. En el resto de países africanos, la práctica puede ser más flexible, pero casi siempre se agradecen pequeñas gratificaciones entregadas con discreción.

Consejos generales para dar propina correctamente

Dar propina es más que una cuestión de dinero: también implica cortesía, adaptación cultural y respeto por la forma en que cada país maneja sus costumbres. Estos consejos te ayudarán a hacerlo de manera adecuada en cualquier destino.

  • Revisar si el servicio está incluido: Antes de añadir dinero extra, mira en la cuenta si aparece un cargo de servicio. Muchos países lo suman automáticamente, y dar más en esos casos podría considerarse innecesario o exagerado.
  • Llevar siempre efectivo en billetes pequeños: Contar con monedas o billetes de baja denominación facilita dar propinas rápidas. Esto resulta práctico en taxis, bares o servicios de hotel, donde entregar cantidades justas refleja previsión y evita malentendidos al pagar.
  • Evitar monedas extranjeras: Aunque sea común llevar suelto de tu país, entregar monedas que no se pueden cambiar no tiene valor en la mayoría de los destinos. Lo recomendable es usar siempre moneda local, para que la persona pueda utilizarla sin problema.
  • Ser discreto al dar la propina: No es necesario hacerlo de manera ostentosa ni llamar la atención. En muchas culturas se valora más un gesto sobrio acompañado de una palabra de agradecimiento, porque transmite respeto hacia la persona que recibió la propina.
  • Confirmar que la propina llega al personal: Cuando pagas con tarjeta en un restaurante u hotel, pregunta si ese monto se distribuye realmente entre los empleados. En algunos casos el dinero va a la empresa, y por eso es mejor darlo directamente en efectivo.