Viajar en Navidad se ha convertido en una tradición para miles de personas que aprovechan estas fechas para reunirse con los suyos o disfrutar de unos días de descanso. Sin embargo, la combinación de meteorología invernal, tráfico elevado y desplazamientos largos convierte estas semanas en uno de los momentos del año con más incidencias en carretera. Por eso, revisar los seguros de coches antes de iniciar el viaje es tan importante como planificar la ruta o preparar el equipaje. Un descuido en la póliza puede suponer un gasto inesperado, una avería sin asistencia o una cobertura insuficiente en plena autopista.
En estas fechas, muchas personas creen que su seguro “cubre todo” o que no es necesario revisar detalles aparentemente menores. Sin embargo, pequeñas omisiones pueden convertirse en grandes problemas cuando surge una avería, un siniestro o un incidente relacionado con el clima. La buena noticia es que evitar estos fallos es sencillo si se conoce qué aspectos revisar y cómo anticiparse a las situaciones más comunes de los viajes navideños.
En este artículo analizaremos los tres errores más frecuentes que cometen los conductores al viajar en Navidad por no revisar su seguro de coche, explicando cómo evitarlos de forma simple y práctica. Tanto si se viaja en familia, con amigos o solo, estos consejos permitirán circular con mayor tranquilidad y sabiendo que, ante cualquier imprevisto, se tendrá el respaldo adecuado.
No revisar la asistencia en carretera (especialmente en viajes largos o con mal tiempo)
Uno de los errores más habituales al viajar en Navidad es asumir que la asistencia en carretera está incluida o que funciona igual que en verano. La realidad es que algunas pólizas solo ofrecen asistencia a partir de cierta distancia del domicilio o tienen limitaciones cuando se trata de remolques, pinchazos, baterías agotadas o rescates en zonas remotas. Además, en invierno aumentan las averías por frío, problemas de arranque y reventones de neumáticos, lo que hace que esta cobertura sea especialmente importante. Sin una asistencia completa, una avería menor puede convertirse en horas de espera o en un coste elevado.
La asistencia en carretera también debe revisarse si se piensa viajar por montaña, por carreteras nevadas o por zonas con riesgo de heladas. Algunas aseguradoras incluyen servicios especiales para clima invernal, mientras que otras los consideran extras que deben contratarse aparte. En este sentido, confirmar si el seguro cubre el rescate en nieve, la entrega de cadenas, el remolque hasta un taller o el traslado del vehículo es importante para no quedarse desprotegido en un momento crítico. Incluso los conductores más experimentados pueden encontrarse con complicaciones durante los desplazamientos de diciembre.
Para evitar este fallo, basta con revisar la póliza o llamar directamente a la aseguradora unos días antes del viaje. De esta manera, al preguntar por el alcance real de la asistencia, los kilómetros incluidos, los límites y los tiempos de respuesta se obtiene una ayuda con anticipación. También es recomendable guardar el teléfono de emergencias de la compañía y tenerlo accesible, ya sea en el móvil o en la guantera.
Pensar que el seguro cubre siempre los viajes al extranjero (y no comprobarlo)
Muchos conductores realizan escapadas navideñas fuera de España sin saber si su seguro es válido en Francia, Portugal, Andorra o cualquier otro destino cercano. Aunque las pólizas suelen incluir la llamada “Carta Verde” o cobertura para ciertos países europeos, no todas funcionan igual ni cubren los mismos territorios. Algunos seguros solo permiten circular en países de la Unión Europea; otros requieren solicitar documentación adicional; y un número considerable no cubren asistencia en carretera fuera del país.
Además, al viajar a zonas con nieve o puertos de montaña, por ejemplo al atravesar Pirineos, se añade una capa extra de riesgo. Si la asistencia en carretera no funciona en el país que se visita, incluso una pequeña avería puede convertirse en un auténtico problema. De la misma manera, la normativa extranjera respecto a accidentes, gestiones de partes o uso de cadenas puede diferir de la española. Por eso, viajar al extranjero sin revisar la póliza implica exponerse a sorpresas desagradables. En un periodo tan concurrido como la Navidad, los tiempos de respuesta pueden alargarse y las necesidades de cobertura aumentan.
Para evitar este error, es recomendable solicitar la Carta Verde o comprobar si está incluida en la póliza antes del viaje. También conviene preguntar específicamente si la asistencia en carretera funciona fuera de España y qué límites tiene. Otro detalle útil es llevar los documentos del vehículo impresos y en formato digital, así como informarse sobre las normas de circulación del país de destino.
No revisar coberturas clave como lunas, neumáticos o vehículo de sustitución
En Navidad, cuando las carreteras están llenas, los desplazamientos son largos y el clima puede ser extremo, ciertos elementos del vehículo tienen más probabilidades de sufrir daños. Las lunas pueden agrietarse por impactos de gravilla, los neumáticos se desgastan más con frío, lluvia o nieve, y una avería grave puede dejarte sin coche justo en mitad de tus vacaciones. Aun así, muchas personas no revisan si su seguro cubre estas situaciones, pensando que forman parte del paquete básico. En realidad, no todas las pólizas incluyen reemplazo de lunas, reparación de pinchazos o coche de sustitución.
El vehículo de sustitución, en particular, suele ser una cobertura opcional que muchas personas pasan por alto hasta que la necesitan. El hecho de sufrir una avería el día antes de volver a casa y quedarte sin transporte para regresar ocurre más de lo que parece durante las fiestas. Igualmente, algunas aseguradoras limitan el uso del coche sustituto a determinados tipos de siniestro, por lo que revisar las condiciones es clave. Asimismo, con los neumáticos sucede algo similar, porque muchos seguros solo cubren pinchazos, pero no daños por baches, hielo o bordillos, muy comunes en invierno.
Para evitar este fallo, conviene revisar la póliza con cierta antelación, identificando qué coberturas clave están incluidas y cuáles no. Si se van a hacer muchos kilómetros, viajar con familia o desplazarse a zonas frías, puede ser recomendable ampliar la cobertura temporalmente para garantizar tranquilidad. Además, también es útil comprobar el estado real del vehículo antes de salir: presión de neumáticos, niveles, batería y estado de las lunas. Con una combinación de prevención mecánica y revisión de la póliza, cualquier conductor puede disfrutar del viaje navideño sin preocuparse por imprevistos costosos o complicaciones innecesarias.
