Viajar en coche ofrece una libertad y flexibilidad incomparables, permitiendo explorar destinos a tu propio ritmo. Este modo de viaje brinda la oportunidad de descubrir paisajes pintorescos, detenerse en lugares inesperados y disfrutar de la carretera como parte de la aventura. Además, viajar en coche es ideal para quienes disfrutan de la compañía, ya que permite compartir la experiencia con amigos o familiares en un espacio íntimo y personal. También es conveniente para transportar equipaje y artículos personales sin restricciones de peso o tamaño. Sin embargo, es importante planificar bien el viaje, asegurando que el coche esté en buen estado y que las rutas y descansos estén bien definidos para disfrutar de un viaje seguro y agradable.
Uno de los recursos indispensables en los viajes en coche, más aún en verano, es el aire acondicionado. En este sentido, recargar el aire acondicionado por cuenta propia puede ser sencillo y conveniente para evitar sorpresas. Para ello, es necesario utilizar un gas de recarga de aire acondicionado y una manguera con manómetro. En este artículo, hablaremos sobre el kit de recarga de aire acondicionado, que incluye un manual de instrucciones y un esquema de diagnóstico, lo que hace que todo el proceso sea posible para prácticamente cualquier conductor.
Recarga de aire acondicionado por cuenta propia
Como ya sabemos, recargar el aire acondicionado por cuenta propia es una solución muy atractiva y fácilmente accesible. Después de comprar el kit de recarga de aire acondicionado, se deben seguir los siguientes pasos:

- Agitar la lata con el producto y conectarla a la manguera de carga. Después de estos pasos, se enciende el motor y el aire acondicionado en modo de recirculación con la máxima potencia y la temperatura más baja. Tras esto, se conecta la manguera con el manómetro a la válvula de baja presión (la lata debe colocarse con la válvula hacia abajo).
- A continuación, se comienza a medir la presión en el sistema. El color blanco indica una presión demasiado baja, el rojo demasiado alta y el verde indica el nivel de presión adecuado para el sistema de aire acondicionado.
- Tras esto, se procede a abrir la válvula de aguja en la manguera con manómetro y se comienza con la carga.
- Se carga aire acondicionado coche, y, se finaliza la carga cuando el manómetro indique 25-55 psi (color verde).
- Se deja el coche encendido durante 20 minutos en el modo descrito al principio.
En todo momento, es importante realizar una nueva medición de la presión después de dos semanas. Esto dará la certeza de que la recarga del aire acondicionado se ha realizado de manera correcta, eficiente y conforme a las especificaciones.
Refrigerante para el aire acondicionado
Un refrigerante fiable para el aire acondicionado permite llenar de manera efectiva y segura el sistema de aire acondicionado del coche. Este tipo de producto viene acompañado de un esquema de diagnóstico y un manual de instrucciones, lo que facilita mucho todo el proceso. Como ya sabemos, también se necesita una manguera con manómetro para recargar el aire acondicionado. El refrigerante contiene gas hidrocarburo natural, seguro para el coche y el medio ambiente. Además, la importancia del agente DYE, gas aire acondicionado coche r134a, emite un contraste especial que permite detectar posibles fugas en el sistema utilizando una lámpara UV.
La recarga del aire acondicionado solo lleva 10 minutos, el gas no es tóxico y no causa corrosión en los componentes del aire acondicionado. Este aire funciona no solo de manera eficaz, sino también eficiente, brindando comodidad en su uso. La tecnología fue desarrollada en un laboratorio en Estados Unidos y se distribuye con éxito en todo el mercado europeo. El kit incluye un par de guantes, un manual de instrucciones y un esquema de diagnóstico.
En general, es importante destacar que recargar el aire acondicionado por cuenta propia, contrariamente a lo que se podría pensar, no es una tarea difícil. Si se opta por este tipo de kit de recarga de aire acondicionado fiable, se podrá disfrutar de la efectividad y eficiencia del sistema de refrigeración del coche. Por consiguiente, recargar el sistema de aire acondicionado en un automóvil es una tarea esencial para mantener un ambiente cómodo durante los viajes, especialmente en los días más calurosos. Sin embargo, muchas personas evitan hacerlo por sí mismas debido a la creencia de que es un proceso complicado o porque prefieren acudir a un taller especializado.
¿Qué beneficios ofrece el uso del refrigerante adecuado para el aire acondicionado?
A pesar de estas preocupaciones, recargar el aire acondicionado por cuenta propia no solo es completamente factible, sino que también puede ser significativamente más económico que llevar el coche a un servicio profesional. A continuación, exploramos en detalle por qué realizar esta tarea uno mismo es mucho más barato que en un taller y cómo puedes lograrlo con éxito.

- En primer lugar, es fundamental considerar los costes asociados con la recarga del aire acondicionado en un taller mecánico. Los servicios profesionales suelen incluir no solo el precio del refrigerante, sino también el coste de la mano de obra, y, dependiendo del lugar y del tipo de coche, el precio total de este servicio puede variar considerablemente, pero no es raro que el coste final supere los 100 o incluso 200 euros. Este precio incluye el tiempo del técnico, el equipo utilizado, y a veces, costes adicionales como la verificación de fugas o la revisión del sistema completo. Aunque estos servicios pueden ser convenientes, representan un gasto significativo que, en muchos casos, es evitable.
- En contraste, recargar el aire acondicionado por cuenta propia implica un coste mucho menor. Los kits de recarga, que generalmente incluyen todo lo necesario para realizar el proceso (como el refrigerante y una manguera con manómetro), están disponibles en el mercado a precios que oscilan entre los 20 y 40 euros. Este precio es una ínfima parte de lo que se pagaría en un taller. Además, un solo kit puede ser suficiente para múltiples recargas, dependiendo del tamaño del sistema de aire acondicionado del coche y de la cantidad de refrigerante que necesite. Por lo tanto, el ahorro no solo se experimenta en la primera recarga, sino que se acumula con el tiempo.
- Además del ahorro directo en los costes de servicio, realizar la recarga uno mismo permite evitar cargos adicionales que los talleres a menudo añaden. Por ejemplo, algunos talleres pueden cobrar por diagnosticar el sistema antes de la recarga o por revisar componentes adicionales como los filtros o los compresores. Aunque estas revisiones pueden ser útiles, muchas veces son innecesarias para la simple recarga de refrigerante y solo aumentan el coste final. Al hacer la recarga por uno mismo, es posible centrarse exclusivamente en lo necesario, evitando así estos cargos extras.
- La recarga del aire acondicionado por cuenta propia también elimina la necesidad de gastar tiempo y dinero en desplazamientos. Visitar un taller a menudo implica dejar el coche durante varias horas o incluso días, dependiendo de la disponibilidad del servicio. Durante este tiempo, es posible que se necesite buscar transporte alternativo o perder tiempo valioso en espera. Al realizar la recarga uno mismo, esto puede hacerse en un tiempo corto y en la comodidad de tu hogar, sin necesidad de adaptarse a los horarios del taller o de incurrir en costes de transporte adicionales.
- Por otro lado, aunque algunas personas puedan sentir que la inversión inicial en un kit de recarga es un gasto innecesario, es importante considerar que este kit puede ser utilizado repetidamente a lo largo de los años. A medida que se adquiere experiencia en el proceso, cada recarga se vuelve más rápida y eficiente, lo que significa que el coste por recarga sigue disminuyendo con el tiempo. Además, contar con el equipo necesario en casa permite realizar mantenimientos preventivos más frecuentes, lo que puede evitar problemas mayores en el futuro y, por lo tanto, ahorrar aún más dinero a largo plazo.
- Otro aspecto que influye en la economía de recargar el aire acondicionado por uno mismo es el control sobre la calidad de los productos utilizados. En algunos talleres, es posible que utilicen refrigerantes de menor calidad para maximizar sus márgenes de ganancia, lo que podría afectar el rendimiento y la durabilidad del sistema de aire acondicionado. Al hacer la recarga uno mismo, se tiene la libertad de elegir un refrigerante de alta calidad, asegurando así un mejor rendimiento del sistema y una mayor durabilidad, lo que se traduce en menos recargas necesarias y más ahorro.
