Cuando piensas en Nueva York, probablemente lo primero que te venga a la mente sean sus grandes rascacielos, la Estatua de la Libertad o Times Square. Sin embargo, la ciudad también cuenta con lugares llenos de historia y encanto, como la Pequeña Italia. Este barrio emblemático, aunque ha disminuido de tamaño con el paso de los años, sigue siendo un punto de referencia para quienes desean conocer el legado de la comunidad italiana. Algunas de las razones son sus calles, locales y eventos, como la Fiesta de San Gennaro, los cuales mantienen viva la esencia de esta parte de la Gran Manzana.

De esta manera, durante este paseo por la Pequeña Italia, te guiaremos a través de sus principales atractivos, cómo la famosa Mulberry Street y sus restaurantes, y las coloridas obras de arte callejero que adornan los edificios. Además, te recomendaremos algunos lugares imperdibles para probar la auténtica cocina italiana y te contaremos la historia de una de sus catedrales más emblemáticas. Al final, te daremos un vistazo a una de las festividades más importantes del barrio, para que puedas planear tu visita y disfrutar al máximo.

Mulberry Street: El corazón de la Pequeña Italia

Mulberry Street es, sin lugar a dudas, el alma de la Pequeña Italia y la calle principal donde la mayoría de los visitantes comienzan su recorrido. Por ello, a pesar de que la autenticidad del barrio ha disminuido, sigue siendo el lugar ideal para disfrutar del ambiente italiano que caracteriza a esta zona. Así que, mientras caminas por Mulberry, verás algunas fachadas pintadas con los colores de la bandera italiana y restaurantes que aún ofrecen platos tradicionales. Este es el lugar perfecto para detenerte y saborear un buen plato de pasta o una pizza recién hecha.

Asimismo, a lo largo de la calle, también se encuentran tiendas que venden recuerdos relacionados con la cultura italiana, por lo que es un buen sitio para llevarte un pedacito de Italia a casa. Además, si tienes suerte, podrás encontrarte con alguna festividad local que añada aún más encanto a la experiencia. De igual forma, durante el mes de septiembre, por ejemplo, la calle se transforma completamente para la celebración de la Fiesta de San Gennaro, una tradición que sigue atrayendo tanto a neoyorquinos como a turistas.

Por otro lado, te recomendamos caminar sin prisa y observar cada detalle, ya que en Mulberry Street puedes encontrar restaurantes con décadas de historia, como Umberto’s Clam House, famoso por sus mariscos y por un episodio relacionado con la mafia que tuvo lugar en el lugar. Así que, si decides visitarlo, recuerda probar alguno de sus platillos y conocer más sobre este rincón cargado de historia.

El arte callejero en Little Italy

El arte callejero en la Pequeña Italia es una de las sorpresas que encontrarás al recorrer este barrio. Aunque antes no era un aspecto que caracterizara a esta zona, en los últimos años los murales han comenzado a transformar sus calles en una galería al aire libre. En este sentido, uno de los murales más destacados es el retrato de Audrey Hepburn, ubicado en Mulberry Street, que con sus vivos colores ha llamado la atención de visitantes y fotógrafos. Este mural, obra del reconocido artista Tristan Eaton, se ha convertido en un símbolo moderno del barrio.

Además del mural de Audrey Hepburn, también podrás ver otras piezas de arte urbano que reflejan la fusión cultural que existe en esta área de Nueva York. Estas obras van cambiando con el tiempo, por lo que es recomendable pasear sin un rumbo fijo y dejarte sorprender por las creaciones que encuentres. En este caso, una buena idea es recorrer las calles cercanas al barrio de NoLIta, donde también han aparecido varios murales en los últimos años, contribuyendo a que el ambiente se sienta aún más dinámico.

También te recomendamos visitar Little Italy y NoLIta con tiempo suficiente para admirar estos murales, ya que muchos de ellos no duran mucho tiempo y cada visita puede ofrecerte una experiencia única. De esta manera, cada rincón de este barrio se convierte en una postal llena de color que combina el pasado y el presente de esta comunidad. No olvides llevar tu cámara o smartphone listo, porque cada esquina tiene algo especial que capturar.

La catedral Old St Patrick’s y su historia

Otro de los atractivos más importantes de la Pequeña Italia es la antigua catedral de San Patricio, conocida como Old St Patrick’s Cathedral. Construida a principios del siglo XIX, esta catedral fue la principal sede de la Iglesia Católica en Nueva York antes de que la actual catedral de San Patricio fuera inaugurada en la 5ª Avenida. Sin embargo, hoy en día, el edificio mantiene gran parte de su esplendor original, con una fachada sobria pero imponente, que se ha convertido en uno de los principales puntos de referencia del barrio.

Por otro lado, si te interesa la historia de Nueva York, te recomendamos hacer una visita a esta catedral para conocer más sobre su papel en la comunidad italiana y su relación con el desarrollo de la ciudad. El interior es realmente impresionante, con vitrales y detalles arquitectónicos que no puedes dejar de ver. Además, es un lugar ideal para hacer una pausa durante tu paseo y admirar la calma que se respira en su interior, en contraste con el bullicio de las calles.

De igual modo, no te sorprendas al ver que la catedral Old St Patrick’s ahora está rodeada de una comunidad muy diversa, en su mayoría de origen chino, ya que está muy cerca del barrio de Chinatown. Este contraste cultural hace que la visita a la catedral sea aún más interesante, ya que refleja cómo la ciudad ha ido cambiando con el tiempo, adaptándose a nuevas poblaciones y preservando al mismo tiempo su legado histórico.

Los mejores lugares para comer en Little Italy

Si hay algo que no puedes dejar de hacer en la Pequeña Italia, es probar la deliciosa comida que ofrece. Y es que, a pesar de que algunos restaurantes han desaparecido, aún existen varios lugares que mantienen el sabor tradicional de la cocina italiana. Entre los sitios que no debes perderte está Umberto’s Clam House, un restaurante conocido por su excelente marisco y por la historia de la mafia que lo rodea. Por lo que, probar sus platillos es disfrutar de una parte importante del pasado del barrio.

Otro lugar imperdible es Ferrara Bakery & Cafe, fundado en 1892 y uno de los cafés más antiguos de Nueva York. En este sitio, puedes degustar tiramisús, pasteles italianos y el famoso gelato al estilo tradicional, que se ha mantenido como una opción favorita de los visitantes durante décadas. Además, es el lugar ideal para hacer una pausa durante tu recorrido y disfrutar de un café espresso mientras observas la vida cotidiana de la Pequeña Italia. Sumado a esto, si buscas una buena pizza a un precio accesible, Da Nico es una excelente opción. Este restaurante ofrece platos clásicos en un entorno muy agradable, y si el clima lo permite, podrás disfrutar de tu comida en su terraza.

La gran celebración de San Gennaro

Si tienes la suerte de estar en Nueva York en septiembre, no puedes perderte la celebración de la Fiesta de San Gennaro. Este evento anual, que se lleva a cabo en honor al patrón de Nápoles, es la fiesta más grande y famosa de la Pequeña Italia. De esta forma, durante 11 días, las calles de Mulberry se llenan de vida, con puestos de comida, desfiles y eventos religiosos que atraen tanto a turistas como a residentes locales. Por lo tanto, es una ocasión perfecta para sumergirse en la cultura italiana y conocer de cerca esta tradición.

Igualmente, el día más importante es el 19 de septiembre, cuando se realiza la procesión en honor a San Gennaro. En este sentido, la estatua del santo recorre las calles, acompañada de música y devotos que participan en la ceremonia. Y durante el desfile, las calles se decoran con luces y banderas, creando un ambiente festivo y único. Por lo que, no importa si eres religioso o no, asistir a este evento es una experiencia que no te dejará indiferente, ya que refleja la importancia de la comunidad italiana en la historia de la ciudad.