Benissa es una cautivadora localidad situada en la provincia de Alicante, que emerge como un tesoro por descubrir entre la costa y la montaña. Esta localidad y municipio cuenta con una rica historia que se remonta a tiempos antiguos y encanta a sus visitantes con una combinación única de patrimonio histórico, arquitectura medieval y un entorno natural impresionante.

Benissa ofrece una panorámica excepcional que abarca desde las alturas de la Sierra de Bernia hasta las doradas playas del Mediterráneo. Su casco antiguo, un laberinto de estrechas calles empedradas y pintorescas plazas, es un testimonio vivo de su pasado medieval. Los edificios históricos, como la Iglesia de la Puríssima Xiqueta dan fe de su legado arquitectónico bien conservado. Por ello, el corazón de Benissa late al ritmo de su historia, ya que cada rincón cuenta una historia y cada callejuela esconde secretos ancestrales. La ubicación geográfica de Benissa es otro de sus encantos, ya que se encuentra estratégicamente ubicada entre las majestuosas montañas del interior y las idílicas playas de la costa.

Esta combinación única ofrece a los viajeros la posibilidad de disfrutar de una amplia variedad de actividades al aire libre, desde senderismo en las rutas de montaña hasta relajarse en las tranquilas calas escondidas a lo largo de la costa. Por tanto, aquellos que quieran visitar la localidad pueden reservar una casa señorial Benissa para alojarse y disfrutar de un sinfín de opciones en este paraíso. A continuación, haremos un repaso a los puntos más destacados de este municipio y localidad alicantina.

Patrimonio histórico y cultural

Benissa es un tesoro histórico y cultural en la provincia de Alicante, donde el pasado se entrelaza con el presente en cada rincón de su encantador casco antiguo. La iglesia de la Puríssima Xiqueta o Purísima Concepción es un impresionante ejemplo de arquitectura religiosa neogótica valenciana, siendo construida sobre los restos de una antigua mezquita árabe. Su imponente fachada de piedra tallada, con torres gemelas y una gran cúpula, domina la plaza principal de Benissa y sirve como punto de referencia histórico y espiritual para los habitantes locales y los visitantes.

Además de la iglesia de la Purísima Concepción, el casco antiguo de Benissa está salpicado de edificios históricos, plazas pintorescas y calles empedradas que invitan a explorar su rico legado cultural. Los antiguos palacios y casas señoriales, como el Palau de los Torres-Orduña, son testigos silenciosos de la historia de la ciudad y reflejan la nobleza y la opulencia de tiempos pasados.

En conjunto, el patrimonio histórico y cultural de Benissa es un testimonio vivo de su pasado glorioso y su identidad arraigada en la historia de la región. Explorar sus calles históricas y admirar sus monumentos es sumergirse en un viaje en el tiempo que revela la belleza y la importancia de su legado arquitectónico.

Playas y calas escondidas

A pesar de que la localidad está situada en el interior, el municipio de Benissa es un destino costero que cautiva con sus impresionantes playas y calas, donde el azul del mar Mediterráneo se funde con el verde de la vegetación circundante. Estas paradisíacas zonas costeras ofrecen aguas cristalinas y paisajes de ensueño, ideales para disfrutar de momentos de relax y diversión bajo el sol.

  • Una de las joyas naturales de Benissa es la cala Pinets, una pequeña playa de arena fina y aguas transparentes que invita al baño y al buceo. Este rincón es perfecto para desconectar y disfrutar de la tranquilidad del entorno, rodeado de acantilados y vegetación mediterránea,
  • Otra opción encantadora es la cala Llobella, una cala de piedras y aguas tranquilas que ofrece un ambiente más íntimo y recogido. Esta cala es ideal para los amantes de la naturaleza que buscan un lugar apartado donde disfrutar del mar y el paisaje sin aglomeraciones.
  • Para quienes prefieren playas más amplias y equipadas, la playa la Fustera es una excelente elección. Esta playa, con su arena dorada y su amplio paseo marítimo. ofrece todas las comodidades necesarias para pasar un día inolvidable en familia o con amigos.
  • Por último, la cala Advocat es una pequeña cala de piedras y aguas cristalinas, ideal para los amantes del snorkel y el buceo. Rodeada de acantilados y vegetación mediterránea, esta cala ofrece un entorno natural impresionante donde relajarse y disfrutar de la belleza del Mediterráneo.

Naturaleza y senderismo

Benissa, más allá de su riqueza histórica y cultural, así como de sus playas, cautiva también por su entorno natural impresionante que invita a los amantes del senderismo y la naturaleza a explorar sus paisajes sorprendentes. En la Sierra de Bernia, una majestuosa formación montañosa que abraza la ciudad, se encuentran algunas de las rutas de senderismo más populares y fascinantes de la región.

Una de las rutas más destacadas es la ruta del Forat de Bèrnia, un sendero que conduce a través de imponentes acantilados y cuevas naturales, ofreciendo vistas panorámicas espectaculares de los alrededores. El punto culminante de esta ruta es el impresionante Forat de Bèrnia, un túnel natural que atraviesa la sierra y brinda la oportunidad única de experimentar unas vistas mipresionantes.

Otro lugar imprescindible para los amantes de las vistas espectaculares es el mirador de Pedramala, que ofrece vistas únicas del mar Mediterráneo y la costa de Benissa. Situado en lo alto de una colina, este mirador es el lugar perfecto para detenerse, admirar el paisaje y tomar fotografías impresionantes que capturan la belleza natural de la región.

Gastronomía local

Además de todos sus encantos, la gastronomía de Benissa es otro verdadero tesoro que refleja la fusión entre la tradición y la calidad. Los platos típicos de la zona son una deliciosa muestra de la riqueza culinaria de la región, donde se combinan ingredientes frescos y sabores auténticos para deleitar los paladares más exigentes. Uno de los platos más emblemáticos es la paella, que, con una receta tradicional de la zona, destaca por su sabor intenso y su textura.

Para los amantes de los postres, Benissa ofrece una variedad de dulces artesanales que deleitan el paladar con cada bocado. Desde los tradicionales pastissets y cocas de almendra hasta los deliciosos turrones y helados, la repostería local es una verdadera tentación para los golosos.