Tenerife, la isla más grande del archipiélago canario, es un destino popular entre turistas nacionales e internacionales durante todo el año, al combinar naturaleza, historia y un clima privilegiado. Aunque dos días pueden parecer poco tiempo para explorar todo lo que Tenerife tiene para ofrecer, puede ser una primera toma de contacto para disfrutar de algunos de sus lugares más emblemáticos y llevarse un recuerdo inolvidable.

La isla, conocida como la «isla de la eterna primavera», ofrece actividades y paisajes para todos los gustos, con infinidad de playas paradisíacas, zonas volcánicas, pintorescos pueblos y modernos centros turísticos. A continuación, vamos a realizar una ruta de cinco lugares imprescindibles que visitar en Tenerife durante un fin de semana. En caso de querer consultar una guía completa, se puede acceder a Pasaporte a La Tierra, un blog que muestra las guías de viaje de Iván y Esther de sus experiencias. Entre esas guías, destaca su guía de esta isla, con 30 lugares que ver en Tenerife para una experiencia completo. Sin embargo, en este artículo vamos a hablar específicamente de 5 de ellos, que ver durante un fin de semana.

El Teide

El Teide, con sus 3715 metros de altitud, es el punto más alto de España y un lugar que no dejar de visitar en Tenerife. Este enorme volcán, situado en el Parque Nacional del Teide, está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es el símbolo de la isla, así como una de las principales atracciones turísticas.

El parque ofrece paisajes lunares únicos en el mundo, con formaciones rocosas como Los Roques de García y extensos campos de lava solidificada. Subir al Teide es una experiencia fundamental que se puede realizar gracias al teleférico, llevando a los visitantes hasta los 3555 metros. Desde ese punto, las vistas son espectaculares, con un paisaje que muestra el mar de nubes y el resto de las islas del archipiélago visibles en el horizonte.

Playa de Las Teresitas

La playa de Las Teresitas es una de las playas más icónicas de Tenerife y un lugar perfecto para relajarse durante esta escapada de fin de semana. Esta playa de arena dorada, situada a pocos kilómetros de Santa Cruz de Tenerife, se caracteriza por sus aguas tranquilas y por su arena, traída del desierto del Sahara.

Se trata de un rincón paradisíaco, perfecto para pasar unas horas disfrutando del sol y el mar. Su amplitud la hace adecuada para pasear, nadar o simplemente tumbarse a descansar mientras se disfruta del paisaje. Además, cuenta con multitud de servicios como duchas, hamacas y chiringuitos donde probar las famosas papas arrugadas con mojo. Asimismo, se pueden realizar distintas actividades acuáticas, como paddle surf o kayak, disfrutando del turismo activo en Tenerife.

La Laguna

San Cristóbal de La Laguna, conocida simplemente como La Laguna, es una ciudad llena de historia y encanto. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este lugar fue la primera capital de Tenerife y es famoso por su arquitectura colonial y su vibrante vida cultural.

Pasear por las calles empedradas de La Laguna es como viajar en el tiempo. Sus casas coloridas, iglesias históricas y plazas llenas de vida son un testimonio de su rico pasado. Entre los puntos de interés destacan la Catedral de Nuestra Señora de los Remedios, el antiguo Convento de San Agustín y la Plaza del Adelantado, el corazón de la ciudad.

Además de su patrimonio arquitectónico, La Laguna es conocida por su ambiente universitario, con numerosos bares, cafeterías y restaurantes donde disfrutar de la gastronomía local. Es el lugar perfecto para perderse, explorar y disfrutar de la mezcla de tradición y modernidad que define a esta ciudad.

Garachico

Garachico, situado en la costa norte de Tenerife, es uno de los pueblos más bonitos de la isla. Este lugar tiene una historia marcada por la erupción volcánica de 1706, que destruyó gran parte del puerto, pero también creó los famosos charcos de lava que hoy son una de sus principales atracciones.

Los charcos, conocidos como El Caletón, son piscinas naturales formadas por lava solidificada, donde los visitantes pueden nadar y disfrutar de las vistas del Atlántico. Por otro lado, el casco histórico de Garachico, con sus calles estrechas es un lugar lleno de encanto que invita a ser explorado a pie. Entre los puntos destacados se encuentran el castillo de San Miguel, una fortaleza que protegía el puerto o la iglesia de Santa Ana.

Anaga

El Parque Rural de Anaga, situado en el extremo noreste de Tenerife, es un paraíso para los amantes de la naturaleza y el aire libre. Este espacio protegido, declarado Reserva de la Biosfera, es conocido por sus particulares montañas escarpadas, sus amplios bosques de laurisilva y sus vistas espectaculares al Atlántico.

Una de las mejores formas de explorar Anaga es a través de sus numerosas rutas de senderismo. Los caminos de este parque, como el Sendero de los Sentidos, un recorrido cómodo para principiantes, o la ruta hacia el mirador de Cruz del Carmen, algo más compleja, ofrecen paisajes que muestran la riqueza natural de la zona. Del mismo modo, los pequeños pueblos de montaña, como Taganana, añaden una parada para tomar algo durante el recorrido.