Belgrado, la capital de Serbia, es una ciudad fascinante que combina una rica historia con una vida cultural y nocturna sin igual. Situada en la confluencia de los ríos Danubio y Sava, esta ciudad ha sido testigo de la caída de imperios, invasiones y resurgimientos, y hoy en día es un destino que mezcla el pasado y el presente de manera única. De esta manera, Belgrado, con una historia que abarca más de dos mil años, ha sido un cruce de caminos entre Oriente y Occidente, lo que se refleja en su arquitectura, su comida y su diversidad cultural.
A través de este artículo, vamos a hacer cinco paradas esenciales que representan lo mejor de Belgrado, desde sus fortalezas históricas hasta sus animadas calles llenas de bares y clubes. Cada parada permitirá descubrir un lado distinto de la ciudad, ya sea para quiénes están interesados en la historia y el arte o para aquellos quieran disfrutar de su energía nocturna.
Fortaleza de Kalemegdan
La Fortaleza de Kalemegdan es el corazón histórico de Belgrado y uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Situada en lo alto de una colina, con vistas a la confluencia de los ríos Danubio y Sava, esta fortaleza ha sido testigo de siglos de conflictos, invasiones y transformaciones. Construida inicialmente por los celtas y expandida durante la época romana, bizantina y otomana, Kalemegdan ha servido como un bastión defensivo clave a lo largo de la historia de Belgrado.
Hoy en día, la fortaleza es un lugar popular tanto para turistas como para locales. Sus murallas ofrecen vistas espectaculares de los ríos y la ciudad, y, en su interior alberga varios monumentos históricos, museos y parques. El Museo Militar, ubicado dentro de la fortaleza, es una parada obligada para los amantes de la historia, ya que ofrece una detallada colección de armas y artefactos desde la época medieval hasta el siglo XX.
Skadarlija
Si se busca experimentar el lado más bohemio y artístico de Belgrado, Skadarlija es el lugar para estar. Este pintoresco barrio, con calles de adoquín y fachadas antiguas, es conocido como el Montmartre de Belgrado debido a su ambiente bohemio y su vibrante vida cultural. Skadarlija ha sido el hogar de poetas, pintores y músicos desde finales del siglo XIX, y, aún hoy, conserva su encanto artístico.
En Skadarlija, los visitantes pueden disfrutar de una cena tradicional serbia en uno de los muchos restaurantes conocidos como “kafanas”, donde la música en vivo, especialmente el tamburitza, acompaña una deliciosa comida. La calle está repleta de galerías de arte, tiendas de antigüedades y pequeños bares que conservan la esencia de una época pasada. Este barrio es el lugar perfecto para sumergirse en la cultura local y experimentar una parte auténtica de Belgrado.
El templo de San Sava
El templo de San Sava es uno de los edificios más impresionantes y emblemáticos de Belgrado. Este templo, dedicado a San Sava, el fundador de la Iglesia Ortodoxa Serbia, es la iglesia ortodoxa más grande de los Balcanes y una de las más grandes del mundo. Con su imponente cúpula y su majestuosa fachada de mármol blanco, el templo de San Sava domina el horizonte de Belgrado y es visible desde muchos puntos de la ciudad.
Aunque la construcción del templo comenzó a principios del siglo XX, su finalización se ha prolongado a lo largo de las décadas debido a diversas interrupciones históricas. Hoy en día, el interior del templo sigue en proceso de decoración, pero su magnificencia ya es palpable desde el exterior. El diseño arquitectónico, inspirado en la iglesia de Santa Sofía en Estambul, refleja la rica tradición ortodoxa y el orgullo nacional de Serbia.
Savamala
Savamala es uno de los barrios más dinámicos y vibrantes de Belgrado, conocido tanto por su vida nocturna como por su floreciente escena artística. Antiguamente una zona industrial, Savamala ha sido revitalizada en los últimos años y se ha convertido en un punto de referencia para la cultura alternativa y el entretenimiento en la ciudad. Este barrio, ubicado a lo largo del río Sava, alberga algunos de los bares, clubes y galerías más modernos de Belgrado.
Durante el día, Savamala es un centro de actividad artística, con espacios creativos como KC Grad y Mikser House que organizan exposiciones, conciertos y talleres. Los visitantes pueden explorar las galerías y descubrir el talento emergente de artistas locales, o simplemente pasear por las calles y disfrutar de los murales y el arte callejero que adornan el barrio. Por la noche, Savamala se transforma en el epicentro de la vida nocturna de Belgrado., con una amplia oferta de bares y clubes que van desde los más relajados hasta los más sofisticados.
Ada Ciganlija
Ada Ciganlija, conocida como la «isla» de Belgrado, es un destino popular tanto para los locales como para los turistas que buscan escapar del bullicio de la ciudad y disfrutar de la naturaleza. Situada en el río Sava, esta península es el lugar ideal para disfrutar de actividades al aire libre, como paseos en bicicleta, kayak, natación o simplemente relajarse en sus playas. Ada Ciganlija se ha convertido en el lugar preferido de los belgradenses para pasar los calurosos días de verano.
Conocida también como el «mar de Belgrado», Ada Ciganlija ofrece una amplia variedad de instalaciones deportivas y áreas de ocio. Además de sus playas de arena, los visitantes pueden disfrutar de canchas de voleibol, tenis, y fútbol, así como pistas de patinaje y rutas para correr o caminar. Ada Ciganlija cuenta también con una animada oferta de bares y restaurantes, muchos de ellos situados a lo largo de la playa.